Previo a la cirugía, el paciente experimenta una pérdida de peso gradual muy significativa, lo que se traduce en una gran mejora en su calidad de vida, pero también supone un impacto estético y muchas veces funcional que no debe dejar de tenerse en cuenta.
Al reducir de forma drástica la masa corporal, la piel no es capaz de adaptarse o retraerse en proporción al peso que se está perdiendo, lo que finalmente causa una importante flacidez, observándose excesos cutáneos en los muslos, los brazos, el abdomen, el pecho y el rostro.
Estas características secuelas suelen tener un impacto negativo sobre la salud emocional del paciente, disminuyendo su seguridad y autoestima.
También impactan sobre la salud física, dado que estos pliegues de piel remanente suponen focos de infección cutánea.
En base a lo expuesto, se puede definir la cirugía post bariátrica como un conjunto de técnicas quirúrgicas que permiten quitar el exceso de piel que presenta el paciente, eliminando los pliegues y tensando los tejidos, logrando así un aspecto corporal armonioso y sin desequilibrios.
Un ejemplo de cirugía plástica post bariátrica es la dermolipectomía abdominal o abdominoplastia, una cirugía que consiste en la eliminación del exceso de grasa y piel, así como, en la reparación del tejido muscular abdominal dañado o debilitado.
Después de perder grandes cantidades de peso, es beneficioso buscar una cirugía plástica después de la pérdida de peso por múltiples razones
Primero, te sentirás mejor. Puede ser difícil sentirse cómodo cuando lleva un montón de piel colgante. Esta piel adicional a menudo provoca erupciones, infecciones y otros problemas. También es posible que tengas dificultades para moverte o hacer actividad física porque la piel se interpone en el camino.
En segundo lugar, deshacerse de esta piel adicional te ayudará a mantenerte saludable. Los pliegues de la piel a menudo albergan microorganismos, lo que puede provocar infecciones en la piel. Estas infecciones de la piel pueden ser difíciles de tratar y pueden requerir antibióticos u otros medicamentos. Deshacerse del exceso de piel puede ayudarlo a evitar estos problemas.
En tercer lugar, la cirugía plástica después de la pérdida de peso puede mejorar su apariencia. Es posible que se sienta más seguro y atractivo después de quitar la piel sobrante. Esto puede aumentar su autoestima y mejorar su calidad de vida.